Camino a Quirihue

Dicen los entendidos que el conformismo es para los "mediocres", pensando eso mientras viajo y con 50 kilómetros más de destino para llegar a lo Quirihue se me viene encima la palabra argumento, y rescata al concepto conformismo del abismo al que lo han sometido tales sabios, pues para conformarse y despojarse de "el algo" hay que tener una serie de argumentos. Y Quien no posee tales temas difícilmente podrá conformarse.

Entonces para conformarse ( me refiero a vivir la vida de otra forma no convencional a estos tiempos de occidentalidad capital), para no vivir esclavo de lo que haya que hacer o de sobretodo, de lo que haya que tener para aceptarse y vivir "tranquilo", debemos manejar los conceptos bases del conformismo material.

A medida que avanza el camino me he topado con baches, de personas que hacen su vida social apuntando con el dedo y tratando a los demás* ( * consciente ficticio que conforma su manera de creerse insertos en algo) como frutos y presas de la mediocridad. Hacen de la superación algo material, siendo este un concepto netamente espiritual y más encima particular.
Condenan al conformismo junto al infierno mismo de sus temores, y demuestran en lo material y en la liviandad de pensamiento su desarraigo interior...la poca monta con ellos mismos.
Y buscan siempre ser aceptados por lo que poseen, no por lo que entregan...y si entregan, su entregar es para recibir un premio y alimentar el perro de su ego.

Miran al personaje de al lado para superarlo y ser felices...pero esa es una carrera sin fin...siempre tendran un alguien sobre ellos...y siempre se sentiran disminuidos y harán descalificaciones para con sus otros.

Se hacen llamar inconformistas materiales, no se sacian nunca...y por eso están condenados a nunca conocer la felicidad verdadera. Sólo son Seres que comen, cagan y duermen.

Claro, en la vida hay cuotas de liviandad...pero solo son cuotas, no filosofías...o se cae de inmediato en el materialismo y en la ley del más asesino.

Se aferran a lo que puedan tener o a lo que puedan mostrar....bloquean la razón primaria y actúan por instinto. La ostentación es una herencia primitiva.

En Particular, por mi propia limitancia mental puedo decir que

En la vida no me faltó nada, ni comodidades ni amor. Mis espectativas han sido mucho más espirituales que reales...por eso ahora me conformo con seguir viviendo y aprendiendo, pero no cultivando la ambición extrema, que se torna patológica e inconsciente. Es muy fácil caer de un límite a otro...así es el filo de la ambición.
También he tenido momentos difíciles, angustiantes, pero sigo vivo...con eso es suficiente para decir que supe salir de aquellos trances negativos.

Que un deseo no se transforme en "ambición" es difícil, pues ya deglutida esa sutil emoción se mata de inmediato la tan anhelada tranquilidad espiritual.



La imágen de alguien saciado es la misma de un personaje conforme.
Un deseo cumplido te hace feliz, te hace conforme; Pero el ser felíz debe ser algo disfrutable; incluso en el respirar, en el saber que estamos trabajando, que estamos en movimiento...este mismo instante te hace ser felíz...el deslumbramiento con cosas simples..eso es ser felíz.
una posesión solo crea orgullo...que no es lo mismo que felicidad...crea un rey midas; un cultor de las pertenencias...un "esto es solo mío", creado por mi propio esfuerzo,me lo debo a mi mismo y un ego que se va acrecentando y el objeto de la pertenencia sigue ahí.

Lo material es bueno en su justa medida; saciar comodidades es reconfortante.
Poder remediar ciertas falencias
versus la naturaleza que nos rodea
y nos condiciona
es justo.

Alguien que logre conformarse con la vida será felíz, está claro...es como un loco para estos tiempos.
Y un loco patológico se pasa la incomodidad por la raja.

Así,
Todos tenemos una gota de ambición. hay que evitar que rebalse la copa.

Cumplir placeres es la tarea de estos tiempos...pero cuales placeres?
descubrir donde está la felicidad bajo los parámetros del placer mateial
nos puede , a la larga, matar
y exterminar
El placer es bueno, nadie vino a sufrir
Hay placeres geniales
como comer, cagar, dormir y reventar la guaramaca
pero hacer del placer material y el hedonismo los únicos motivos
por los cuales vivir
es una enfermedad

el único desafío somos nosotros mismos
y si afirmas la espectativa en como viven los demás
estás haciendo la vida de los demás
y te conviertes en parte de la masa imaginaria que crees que te apunta
con su dedo en forma de pico vaginal

Cuando llegué a este pueblo
me dijeron que era igual.

¿Hay culpables?